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Jaime, Mario y Benjamín |
“La vocación a
seguir a Jesús” fue el lema del encuentro vocacional
realizado en Curicó este pasado 3 al 4 de agosto.
Una
frase que quizás hoy en día a muchos nos llama a seguirlo y a otros nos
interpela más en el temor de pensarlo. Dos sentimientos muy validos y valorados
en nuestra realidad actual, puedo decir que dentro lo vivido en esta jornada
fue interiorizar y profundizar que la VOCACIÓN es hoy!
El
mismo joven Francisco de Asís fue llamado a una conversión
profunda, en medio de un mundo distraído y lejos del evangelio al igual que la
sociedad actual está llena de distracciones que nos alejan de Jesucristo y del camino
que queremos seguir y anhelar. Pero Jesús
sigue llamándonos: “síganme y yo los haré pescadores de hombre”, el texto
de san Marcos leído en esta jornada. Cuánto sentido nos puede llegar esta frase
en que la propuesta de vida se puede hacer llamativa eh interesante. Es hoy
cuando el señor nos pide dejar lo que estamos haciendo para seguirlo.
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El desierto |
Escuchar
esa voz interior
que solo viene del corazón y no del exterior, que solo nos puede confundir y
hacer equivocar, es por ello que es importante restaurar nuestra propia
casa que en momentos quizás pueda estar en ruinas y al borde del colapso.
Reconstruirla, repararla y habitarla para así llevar una vida llena de alegría,
amor, fe y esperanza.
Otro
momento vivido fue el día de santa María de los Ángeles o el “perdón de Asís”
significativa fiesta para toda la familia franciscana en el mundo, cuanto
sentido nos da a nuestros caminos y al mismo carisma el lugar en donde comenzó
todo. Lugar a las fueras de la cuidad de Asís, en la periferia, donde a
Francisco se le otorgo cuan santo lugar, lugar sencillo del cual podemos
rescatar lo esencial, lo simple, lo que solo nos puede llevar a Dios. Así lo
quería Francisco para todos sus hermanos; estar en constante alabanza y sentirse
amados, llamados y enviados.
Como
refiere un extracto de la oración ante el Cristo de san Damián: “para que haga
siempre tu santa y verdadera voluntad”.
Fueron
días significativos para nosotros en nuestra búsqueda y dar las gracias por la
acogida fraterna, entregada por los hermanos franciscanos conventuales de
Curicó
PAZ Y BIEN
Mario BARRASA